Blogia
samadhi

Hachiko

Emotiva alegoría sobre el concepto de pérdida, visto a través de la fidelidad de un perro. Conlleva un inevitable y peligroso riesgo de dogmatismo metafísico, acaso en cierta medida anantrópico, pero cómo se puede renunciar a un sentido profundo de todos los acontecimientos de la vida, ya sean estos grandes e importantes o esperados, y los apenas percibidos de la vida cotidiana, inesperados, nimios o molestos como tener que hacerse cargo de un cachorro perdido.

0 comentarios